Feliz cumpliaños a mí.....

3/27/2007 12:40:00 a.m. Posted by Azrael

El día de hoy (o ayer, pues ya es de madrugada) recibí el mejor regalo de cumpleaños hasta la fecha.
Pues resulta que llego al trabajo, y me encuentro con mis actuales compañeros en el tercer piso del edificio; habíamos legado sólo 3 de nosotros: Ratón, la Chica Misteriosa y yo. La llamaré CM de ahora en adelante porque me pidió mantener el anonimato (por el momento, hahahah), además que me da hueva estar poniendo "Chica Misteriosa" una y otra vez ad nauseaum. el caso es que fuimos llamados por nuestra supervisora para ir al primer piso del edificio, pues aparentemente habíamos sido realojados a ese lugar, y nosotros estábamos en el tercero. Ratón bajó primero, y yo, como cualquier wevón que se respete, esperé hasta el último minuto para darme de alta y be jara, y así hacer más tiempo para esperar a que CM terminara su llamada.
Antes de bajar por las escalerlas, lo cual ya se está volviendo costumbre, CM me dijo que me tenía un regalo de cumpleaños, a lo cual pregunte con cierta impaciencia: "y qué me vs a regalar?" "Espera a que lleguemos a las escaleras" me dijo tratando de callarme. Al abrir la puerta de las escaleras, me dio su celular y me dijo: "tomé unas fotos que te van a gustar, y verlas va a ser tu regalo de cumpleaños".
En ese momento ya me estaba dando una idea de lo que quería decir, ya que ella dice ser lesbiana, e inocentemente pensé que serían fotos de ella con su pareja en poses sugestivas o algo por estilo (soy hombre, qué quieren?). Cuál fue mi sorpresa al abrir el celular, entrar al menú de fotos y ver la carpeta de la cámara repleta de fotos de CM en tanga! Nó solo era una tanga, eran tangas de distintos colores y sabores, oh, sí!
Debo confesar que el presenciar tal espectáculo despertó una sensación muy extraña en mí, sin embargo no dejé de disfrutar las fotografías una a una, tan rápido como podía mientras bajábamos las escaleras. También debo admitir que CM tiene un cuerpo muy bonito, ya que es delgada y hasta cierto punto diría que es atlética, sin llegar a ser muscular. su mejor atributo, y por mucho, sería su parte baja; pues su cadera, cintura, muslos y piernas tienen una bella armonía característica de las mujeres delgadas.

A final de cuentas disfruté mucho de las fotos, las cuales sin ser pornográficas, si eran bastante sexys, sólo espero que me puedan dar esa clase de regalo en todos mis cumpleaños!!!!!


Fuera de eso un amigo se salvó de una suspensión gracias a que nuestro agente de calidad le perdonó un monitoreo donde el cliente fue transferido al departamento equivocado, lo cual es motivo de suspensión, además de una calificación de cero en el monitoreo. y le presumí a mi supervisora una carta de felicitación que obtuve hace un mes por parte del director de operaciones del centro, en el cual mencionan que escucharon una de mis mejores llamadas, lo cual sé que hace feliz a mi super.

Mi vieja mula ya no es lo que era...

3/26/2007 02:41:00 a.m. Posted by Azrael

Este es un artículo publicado originalmente en: http://www.bbc.co.uk/consumer/tv_and_radio/whistleblower/banks_20070321.shtml

Se infiltra periodista en banco Barclays; revela abusos

Una reportera de la BBC pasó casi medio año en la plantilla del tercer banco del Reino Unido y dio a conocer cómo los empleados se ven obligados a mentir a los clientes para vender los productos bancarios y alcanzar sus objetivos
Una periodista de la cadena británica BBC se infiltró durante casi medio año en la plantilla del Barclays, tercer banco del Reino Unido, y reveló “graves” conductas y abusos en su servicio telefónico de atención al cliente y en sus sucursales.
En un programa emitido este miércoles en la cadena estatal con imágenes grabados con cámara oculta, la periodista Amanda Egbujo, que trabajó en el servicio telefónico de atención al cliente y en una oficina de la entidad, explicó cómo los empleados del banco se ven obligados a “mentir y estafar” a los clientes para vender los productos bancarios y alcanzar sus objetivos.
Fuentes de Barclays aseguraron hoy que el banco se toma muy en serio las denuncias del programa de la BBC y que no aprueba los comportamientos que se mostraron en el programa.
Además, indicaron que, tras ver los vídeos, investigarán los hechos y tomarán las medidas necesarias.
En el programa aparece un instructor que confiesa hacerse el tonto cuando los clientes se quejan de las abusivas comisiones y que anima a los empleados a que no digan “toda la verdad”.
El programa de la BBC, titulado Whistleblower y que se dedica a denunciar desde dentro prácticas ilegales o corruptelas, trabajó el caso durante nueve meses después de recibir un chivatazo de una ex empleada del banco.
Esta ex trabajadora declaró sentirse disgustada por lo que le habían pedido que hiciera cuando trabajaba en el servicio de atención al cliente del banco.
Durante el tiempo que la periodista infiltrada trabajó para Barclays, grabó con cámara oculta cómo los empleados “mentían” para conseguir vender productos, además de inducir a errores.
A su vez, algunos empleados admitieron aplicar servicios con comisiones a cuentas bancarias de clientes sin que éstos hubieran aceptado o contratado dichos servicios.
Además, la periodista aseguró que a los clientes se les cobran comisiones consideradas ilegales por los expertos y reveló defectos en la seguridad del banco.
Uno de los responsables de una sucursal admite en un vídeo con cámara oculta que graba la periodista infiltrada que el coste para el banco por tener una cuenta en números rojos no supera los tres euros, y sin embargo, el banco cobra 45 euros por cada transacción realizada en esa situación.
La ley británica establece que no pueden lucrarse con este tipo de cargos a sus clientes, algo que los propios bancos admiten.
Precisamente la Oficina de Competencia del Reino Unido (OFT), que el año pasado dijo que cobrar más de 12 libras (unos 18 euros) por ello le parecía ilegal, analiza actualmente estas comisiones y se espera que en las próximas semanas se pronuncie y establezca ese tope.
En el reportaje se puede ver cómo uno de los instructores que preparaban a la periodista infiltrada para trabajar en el banco confiesa hacerse el tonto con los clientes que se quejan por las comisiones.
“Ellos empezarán a gritar, a ser groseros, a llorar, a echarte la culpa diciendo que sus hijos se van a morir de hambre, pero mi actitud es la de ‘no lo conozco, no me importa”, dijo el instructor.
El Barclays no quiso confirmar si denunciará a la BBC por haber usado cámaras ocultas en sus oficinas, aunque sí dijo que la periodista dio “referencias falsas” al no presentarse como tal y que “no se la autorizó a grabar esos vídeos”.
El banco también se disculpó “profusamente” a los clientes que aparecen en el vídeo y que tan mal fueron tratados y con los que se intentará poner en contacto, entre ellos un jubilado al que, tras denegarle un crédito de 500 libras, trataron de venderle de forma abusiva un seguro contra incendios para su casa.
El programa llega a la conclusión de que uno de los motivos que pueden llevar a tales comportamientos de los empleados es la fuerte presión que tienen los directores de sucursales o de otros departamentos para conseguir los objetivos que se les imponen.
Al mismo tiempo, sin embargo, los empleados pueden obtener ingresos extras por cada venta que realizan de hasta 800 euros adicionales al mes.
El Barclays obtuvo unos beneficios récord el año pasado de 4.571 millones de libras (unos 6.776 millones de euros), un 33% más que el año anterior, lo que provocó la ira de clientes y asociaciones de consumidores por las altas e “ilegales” comisiones.





Creo que el reportaje es sólo la punta del iceberg. El comportamiento sin ética, el lucro indebido y básicamente la forma en que se hacen los negocios de ahora como telemarketing o servicio a cliente (o una nueva modalidad que incluye a ambos, pregunten a cualquier compañía telefónica) se han inclinado hacia este tipo de prácticas.

Yo trabajo en una compañía que hace "servicio a clientes", sin embargo dentro de las métricas que debemos cumplir como "agentes" son las ventas (debemos ofrecer servicios extras a nuestros clientes, como planes de internet o incluso teléfono adicionales), el tiempo promedio por llamada (es decir, entre menos nos tardemos con el cliente, mejor) y la "satisfacción del cliente".

Los términos en comillas los puse así porque son en realidad una farsa, a las compañías no les importa qupe tan satisfechos, contentos o leales sean tus clientes; mientras sigan obteniendo dinero, pueden quedarse son uno solo. Esta clase de objetivos fijados por las compañías casi "obligan" a sus empleados a recurrir a engaños y "medias verdades" para lograr tales objetivos.
Aunque no niego que no faltan los gandallas que se aprovechan de los clientes para obtener comisiones elevadas e incluso quienes cometen fraude de ventas para engrosar sus depósitos de nómina.

En conclusión, creo que en lugar de juzgar a un banco por tales prácticas, deberíamos analizarnos como sociedad y poder determinar qué salió mal a la hora de educarnos, ya sea en la formación que recibimos en la escuela, o la que recibimos en la casa, si es que recibimos alguna.

Suerte o destino?

3/22/2007 03:21:00 p.m. Posted by Azrael

El día de ayer sucedió algo poco común: el camión donde yo iba rumbo a mi casa después de un día de trabajo un tanto... pesado, se estrelló con otro cámión.

Esto sucedió mientras yo estaba en lo que solemos llamar "la jeta viajera"; es decir, estaba dormido en el camión.

Antes de que todo eso pasara, yo salí del trabajo un poco tarde, pues me estaba despidiendo de una amiga, y al llegar a la parada del autobús vi que el camión en el cual normalmente me voy a mi casa venía lleno, llenísimo hasta la madre, y decidí caminar un poco más para tomar otro camión, con la esperanza de poder irme sentado y jetearme, como es costumbre.

al llegar a otra cuadra, donde también se para el camión, solamente estaba un camión de otra ruta, que aunque también pasa cerca de la casa, me deja a varias cuadras de mi domicilio, lo cual me hizo dudar unos pocos segundos. Subí al camión después de que el conductor se bajara y comprara unos elotes en vaso (típica comida chatarra de la región) para el y su acompalante, una delgada chica con cara de niña chiquita. A mí me pareció algo extraño, pero supuse que era o una amiga o la novia del conductor, y aunque el hijo de la chingada del conductor se tardó como 10 minutos para comprar su mugrero, en ese momento sólo me importaba el hecho de que había encontrado el camión casi vacío.

Me dormí como unos 40 minutos, lo cual ya era bastante, considerando que esa ruta tarda unos 35 minutos en llegar a donde yo me bajo. Desperté después de oir un estruendo, y al sentir que mis rodillas golpeaban el asiento enfrente de mí. El camión había colisionado con otro camión que se había detenido unos metros adelante, en otra parada oficial a mitad de camino desde mi trabajo hasta mi casa. por lo que pude oír mientras despertaba, un niña pequeñ se había golpeado la cabeza con un asiento, pero fuera de eso todos estaban ilesos, ya que el choque se dio a baja velocidad.

Como es normal en esta clase de situaciones, tuvimos que esperar hasta que llegara otro camión de la misma ruta para terminar el viaje, lo cual tardó otros 30 minutos.
Terminpe llegando una hora más tarde a la casa, además de que me molestaba un poco la rodilla izquierda, pero nada serio.

Algo que reflexioné mientras esperaba al segundo camión fue que como sociedad nos estamos violviendo más cínicos y a la vez más ap+aticos, ya que nadie de los que presenciamos el accidente tuvo la voluntad para prestar su celular y llamar a una grúa a a la ambulancia para ayudar a cualquier posible herido, además de que un par de estudiantes discutía sobre robarle el dinero al conductor del camión, quien lo había dejado aún en el camión, y él se encontraba discutiendo con el conductor del otro camión.

El caso es que nunca deja sorprenderme el nivel de estupidez que podemos alcanzar los seres humanos; además de que no salí herido, lo cual estuvo bien y mal: bien porque no hubo dolor implicado en el asunto, y mal porque así no pude cobrar indemnización ni estar incapacitado por algunos días.

Una Pequeña Historia Real (3a Parte)

3/11/2007 05:17:00 a.m. Posted by Azrael

(Posteada originalmente en Octubre, 2005)


Después de más de 3 meses de ausencia neuronal de mi parte, les presento ahora la tercera parte de mi historia, con la cual no sé si alguno de mis lectores llegue a identificarse con la narración aunque sea un poco, pero realmente siento necesario que sea contada....

Fueron algunas semanas después de que aquel torrente emocional me había arrastrado, cuando me di cuenta que ya no había marcha atrás, Diana era la mujer de mi vida y tenía que hacérselo saber... Se acercaba Marzo, y con él mi cumpleaños, además de la llegada de la primavera y la temporada de calor más terrible en mis 8 años de vivir en Nuevo León. En el trabajo de guardia las cosas iban igual que siempre, sólo que ya no me dolían los pies después de un turno completo (gracias a dios soy muy adaptable, o en este caso me acostumbro al dolor fácilmente), y todo fluía como si fuera planeado. Aunque yo sabía dónde vivía Diana, no iba por ella, ya que no quería sofocarla, ya conocía sus necesidades de libertad y me parecía algo fuera de tono que fuera por ella a su casa para ir al trabajo, además de que nuestros turnos rara vez coincidían (lo que siempre pasaba era que yo me iba con ella del trabajo a su casa, o a la mía ^^). Ese día, el gerente de la tienda me pidió que por motivos de seguridad no permitiera a ningún empleado, por ningún motivo, salir del área de venta, ya que últimamente se estaba perdiendo algo del inventario, lo cual me pareció una tremenda pendejada, pues todos sabíamos que el jefe de bodegas era el único con acceso al inventario y la capacidad para mover la mercancía, además de que era un tranza de mierda, pero en fin.
Diana llegó a eso de las 3, le tocaba el turno de tarde esa semana, y me saludó como siempre, con un tierno y rápido beso, mientras se preparaba para empezar el día (o tarde). Yo solamente la contemplaba, como un idiota, mientras se movía de un lugar a otro, con esa energía inagotable que siempre la ha caracterizado. Aquellas ideas de compartir mi vida con esta chica se volvían cada vez más recurrentes, hasta llegar a un punto en el que no lo podía soportar más y tenía que desahogarme haciendo algo, afortunadamente siempre podía recurrir a cantar una canción para relajarme un poco.
Eran casi las 5 de la tarde, y el calor se podía sentir incluso dentro de la tienda, donde había aire acondicionado, cuando Diana se acercaba a la salida con un carrito lleno de cajas vacías. tuve que acercarme lo suficiente como para que me viera, y le dije: "Si quieres, yo tiro las cajas al contenedor por tí". "No, está bien, yo puedo hacerlo" me dijo en un tono un tanto apurado. "Bueno, en realidad tengo que hacerlo yo, ya que me pidieron que nadie saliera del área, ni siquiera para tirar las cajas". -"En serio, yo puedo hacerlo, déjame salir...." "lo siento, pero no puedo dejarte salir, no está permitido por el momento..." "Bien, haz lo que quieras!" -Prácticamente gritó mientras empujaba el carrito hacia mí. Me quedé analizando sus palabras por un momento y no encontré sentido alguno para su disgusto, y en ése momento no le puse atención.
Salí a tirar las cajas en un contenedor que había afuera, que por cierto ya estaba más que lleno, así que estuve batallando unos 10 minutos hasta que pude tirar la última caja, casi era una tarima lo que había arrojado al estúpido contenedor, que para entonces ya estaba a punto de reventar. Al regresar a la tienda algo me hizo entender que esa discusión no había pasado por la nada. Fui con ella para hablar, saber si tenía algún problema en su casa, o algo por el estilo, pero no me quiso dirigir la palabra, le pedí disculpas si por alguna razón la había tratado mal o algo, pero no me respondió, no tuve mucha paciencia y me retiré del pasillo donde estaba, y continué con mis rondas por la tienda, revisando pasillos y el área de paquetería. Al terminar el día, fui de nuevo con ella para saber si quería que la acompañara a su casa, pero al parecer se me había adelantado, pues ya no estaba. No pensé que sería una buena idea ir a su casa, ya que su mensaje era más que claro, por el momento no me quería ver.
Dejé las cosas por la paz esa noche y me dispuse a dormir, no sin antes volver a reflexionar en lo que había sucedido, una vez más sin encontrar sentido a la situación.

Llegó el siguiente día, y yo estaba ya en mi trabajo, cuando llegó ella, radiante como siempre, y al verme todo parecía igual que siempre, saludándome con un beso lleno de chispas, lo cual me intrigó aún más. Era la primera discusión que teníamos, y aunque a mi me desconcertó su reacción el día anterior, me dejó perplejo su actitud el día siguiente, pero me sentí un tanto aliviado de ver que no estaba molesta. El día trascurrió sin problemas, además de que Claudia nos estaba invitando a una fiesta más en su casa, las cuales ya eran de cajón para ir a beber hasta perder el conocimiento. La fiesta (o más bien peda) sería ese mismo Viernes, y estábamos a Miércoles, pero todos sin dinero, a lo cual Claudia nos despreocupó alegando que otros amigos llevarían todo lo necesario. el Jueves, al salir del trabajo con Diana, hablé con ella acerca de lo sucedido el Martes, a lo cual ella respondió que no sabía que había pasado, que tal vez era el calor o la prisa, y que no entendía realmente por que había reaccionado de esa manera, además de que me pidió disculpas. Lo más raro del asunto fue que justo cuando iba yo a decir algo, ella empezó a llorar, de una forma muy silenciosa; yo no pude reaccionar de forma inmediata, pero lo que pude hacer fue abrazarla sin preguntarle por qué, solamente me limité a sostenerla entre mis brazos y cubrirla de besos.......

Una Pequeña Historia Real (2a Parte)

3/11/2007 05:03:00 a.m. Posted by Azrael

(Originalmente posteada en Julio, 2005)

Después de días y días de no poder escribir algo, finalmente un impulso nervioso me ha obligado a continuar con esta pequeña historia, esta vez en su segunda parte, que si bien no es tan extensa y detallada como la primera, también ayuda un poco a romper el silencio en las páginas de este diario que más bien sirve como sillón de Psicoanalista...


Esa misma noche, al llegar a mi casa, no tenía ganas de dormir. Simplemente no podía creer lo que había pasado, y sin embargo por alguna razón no me encontraba del todo satisfecho con el resultado de los hechos; todo me parecía algo ensayado, como si hubiera sido preparado de alguna forma para que todo sucediera así. Sin embargo me convencí de que poco a poco me acostumbraría, y tal vez hasta lo llegaría a disfrutar....
Ese día llegué un poco antes de las 7, 30 minutos antes para ser más preciso, ya que me tocaba "abrir" tienda, que en realidad se trataba de esperar a que llegara el gerente y ÉL abriera la tienda, ya que a mí no se me entregaban las llaves para abrir. El gerente llegó justo penas unos minutos después de mí, con su cara de tipo bajo los efectos de algún estimulante (Coca, según mis deducciones), con los ojos bien abiertos y un semblante algo perturbador; es decir, pocas veces en tu vida puedes ver semejante espectáculo: Tenía una forma de mirar las cosas como si fuera la primera vez en su vida, además de que siempre parecía estar en todo, mirando hacia allá, y luego volteando para acá; aunque no se notaba mucho, a mí me daba escalofríos. "¿Listo para empezar?" me preguntó mientras sonreía y mostraba sus dientes blancos como perlas. "Pues ya estamos aquí, ¿No?"- Respondí casi como por inercia. Abrió rápidamente la puerta principal de la tienda, aunque al entrar ambos, me entregó las llaves para abrir solamente a los empleados del turno de mañana, ya que la tienda no abría sino hasta las 8. El Gerente se introdujo casi corriendo al área de bodegas, donde también estaba su "oficina"; una pequeña área separada por paredes de cubículo de oficina llenos de carteles promocionando las prácticas y metodologías de la Franquicia Waldo's Mart. Yo me quedé en la puerta principal, aquella puerta automática con sensores de movimiento instalados en la parte superior, que hacían ver a la tienda como un supermercado, con las partes metálicas pintadas de rojo brillante, como todas las demás ventanas del establecimiento, me quedé mirando al vacío con las llaves en la mano, tratando de revivir aquel momento mágico, en el cual el murmullo del viento entre los árboles y el silencio de la noche contrastaban con el calor de su respiración rozando mi piel mientras la besaba...

Al poco tiempo llegaron las cajeras, Bertha y la otra que en estos momentos no recuerdo su nombre, ya que era nueva y aún no la conocía bien; a Bertha la conocía porque desde el primer día que llegué me empezó a platicar de todos los que trabajaban en el lugar, lo cual me pareció bastante útil y a la vez algo morboso, pero dejé de prestarle atención a mis prejuicios al empezar a conocerlos a todos. Esta señora, en sus treinta y tantos, estaba llena de vida y de buen humor, siempre haciendo comentarios jocosos sobre todos los que la rodéabamos, sin faltarnos una sola vez al respeto. Ya eran casi las 7:30 cuando llegaron las paqueteritas, con los típicos uniformes Blanco y Negro; eran las Gemelas, de las cuales ahora no recuerdo sus nombres, pero que se hicieron muy buenas amigas mías en su tiempo. Apenas de 1.50 de estatura, las dos linduras llegaban con la misma cara soñolienta; era obvio que se habían desvelado la noche anterior, tal vez en una pijamada, y se veían más lindas con esas caritas pálidas y con los ojos entrecerrados. No pude evitar reírme un poco, a lo cual una de ellas respondió lanzándome una bolsa de plástico a a la cara.

Ya todos se preparaban para abrir la tienda, los empleados de piso ya estaban acomodando los productos en los estantes, mientras el encargado de la bodega se ajustaba la faja ortopédica, los agentes de seguridad del banco llegaban para retirar el efectivo de las ventas de ayer, mientras uno más se encontraba afuera del estacionamiento, portando una escopeta que aparentemente se acercaba a su jubilación. En esos momentos me gustaba imaginar que habría francotiradores en el techo de uno de los edificios cercanos, listo para acabar con alguno de los guardias mientras un comando armado llegaba para robar la caja fuerte de la tienda, lo cual en realidad era una completa idiotez, pero me divertía un poco con la imaginación. Al fin dieron las ocho, y ajustaba el sensor de la puerta principal para abrise cuando se acercara una persona, lo cual no fue necesario pues ya había gente esperando afuera de la tienda para comprar. Comenzó un nuevo día el cual habría transcurrido sin contratiempos, o al menos hasta que llegara Claudia, la cual yo sabía que para entonces ya conocería la historia de anoche. Las horas pasaron razonablemente rápido, más que nada gracias a la estación de radio que el gerente puso en la música de fondo de la tienda, la cual solamente pasaba Baladas pop en español. Me pasé buena parte de la mañana en las Cajas, cantando canciones para las paqueteritas, que también resultaron ser excelente audiencia, pidiendo otra y otra canción. mis temas favoritos en ese momento eran "Sirena", "Te Vi Venir" y "Kilómetros" de Sin Bandera; "Te Amo" y "Fuera de Este Mundo" de Franco DeVita, "El Problema" de Arjona, "Bella" de Ricky Martin y "Y Tú Te Vas" de Chayanne, los cuales canté con mucho gusto a petición de mis admiradoras :P .

El día siguió su curso, con clientes que iban y venían, hasta que dieron las 3 de la tarde. Yo sabía que Claudia llegaría otra vez tarde, lo cual ya no era sorpresa para nadie, ya que era la "Consentida" del gerente. A las 3 con 10 llegó Claudia; esa chica Morena y delgada, con cuerpo de modelo, cabello y ojos negros, hermosa como una gitana. pasó por la puerta principal de la tienda con el habitual uniforme de la empresa, pero muy a su estilo; Blusa de botones de color rojo casi llegando al tono de los autos Ferrari, y un pantalón negro ajustado a la altura de la cadera, dejando ver apenas un rastro de la tanga del mismo color. Mis lectores pueden llegar a pensar que me sentía atraído por esta despampanante chica, pero esa sensación habría muerto mucho antes de haber empezado; simplemente no es ésa la clase de personas con las que puedo mezclarme fácilmente. Al llegar ella me saludó de forma por demás efusiva, daba saltitos y grititos de emoción, como si yo hubiera anotado un gol o algo por el estilo, que en sentido figurado era exactamente lo que había hecho. "Ya lo sé todo, Estuve hablando con Diana por el cel y me contó lo de anoche con lujo de detalles. ¡También me dijo que eras todo un casanova!" -Dijo mientras me guiñaba y me daba un codazo en el costado. "Entonces supongo que no me tengo que someter al clásico interrogatorio de la comadre..." -Respondí de una forma un tanto sarcástica, lo cual no me pareció muy propio en ese momento, que pero que a final de cuentas era parte de mi naturaleza... "Para nada, las preguntas apenas comienzan!!"- Me dijo mientras sonreía y mostraba una mirada atemorizante en su rostro. Debido a mi egolatría y mi necesidad obsesiva de saber que a la gente le interesa mi vida, contesté a todas y cada unas de sus interrogantes, que iban desde los más inverosímil, como que si nos gustan las mismas cosas, la música, etc., hasta algunas realmente perturbadoras. Habiendo Terminado el cuestionario, volvimos a nuestras respectivas áreas de trabajo y continuó el día sin mayores acontecimientos, aunque me pasé todo ese tiempo pasando una y otra vez ese dulce momento....

Debo Hacer pausa en mi relato para hacer saber a ustedes que si trato de contar la historia día por día, realmente me tomaría mucho tiempo en terminar la historia, debido a la gran cantidad de detalles que involucran a la historia, pero me parece justo informar que en aquellos días que tuve el placer de tener a Diana a mi lado fueron momentos clave en mi vida, sobre todo una tarde que recuerdo muy bien, en la cuál nos preguntábamos el uno al otro cómo serían nuestras vidas de no habernos conocido. Nos encontrábamos en un parque cerca de su casa, donde había varios juegos para niños, y bancos de piedra pintados de verde y blanco donde se sentaban los padres para vigilar a sus hijos. Recuerdo que habíamos caminado ese día a través de las calles de donde vivía para llegar a ese lugar. La puesta de sol hacía un hermoso contraste con la hojas verdes de los árboles, que mostraban alargadas sombras sobre el campo, extendiéndose hasta el asfalto de la avenida. Ella me dijo que yo era la primer persona con la cual no había tenido problemas de comunicación, y que le gustaba mucho saber que también había una parte sensible en mi persona, además de mi afición por el canto, el cual ella también compartía. Yo le dije que ya no podía imaginar mi vida sin tenerla presente a ella y sus locuras, también le confesé que ella era una de las únicas personas capaces de hacerme reír a carcajadas con su sentido del humor, y también que desde que la conocí sabía que algo en ella era diferente a las demás, no sé si sería por su independencia, o por su forma sincera y desenfrenada de actuar. Aquella tarde se volvió noche mientras seguíamos platicando, y había ratos de silencio mientras los besos y las caricias reemplazaban a las palabras, como las olas que llegan a la playa para hacer sonar su intermitente murmullo. Hubo varios momentos así en la relación, sin embargo yo sabía que algo estaba cambiando en mí, algo que en los primeros días no podía entender; al estar con ella todo parecía tener sentido, y en momentos se empezaron a formar ideas y pensamientos que nunca antes habían cruzado por mi mente. En momentos incluso llegué a pensar que ella era la mujer con la cual me gustaría pasar el resto de mis días, sin embargo sólo lo tomaba como eso, como fantasías que eran, y nunca se lo dije, por la misma naturaleza de nuestra relación, la cual no era tan formal como para poder plantear esa clase de situación; además de que yo aún tenía demasiadas responsabilidades con mi familia.....



Por el momento ésta es la segunda parte, la cual espero no piensen que vaya a dejar la historia así, pues aún falta una tercera parte y la todavía inconclusa cuarta parte, siendo esta última el desenlace de la historia....

Oblivion Is The Only True Death

3/11/2007 04:54:00 a.m. Posted by Azrael

En pocas palabras, aquellos que son recordados para siempre obtienen la inmortalidad, incluso cuando sus cuerpos se marchiten, y se vuelvan polvo como todo en este mundo. y como ser olvidado es lo mismo que morir, en esta ocasión pienso traer de vuelta a la vida algo que dejé muerto, es decir, olvidado en mi blog de MSN. es uno de los recuerdos que aún mantengo en mi mente debido que fue una de las etapas clave de mi vida, y me sentiría más que honrado en compartirla con ustedes, mis dos lectores, haha.

Empezamos...

Una Pequeña Historia Real (1a Parte)
En lo poco que llevo en este plano existencial, me he dado cuenta que en cuanto a relaciones se trata, casi siempre hay una serie de reglas predefinidas que si bien nadie se ha atrevido, o se ha puesto a descifrarlas, son imperativas y permanentes (aunque claro, siempre hay excepciones) dentro del comportamiento sociológico de la especie humana:

Regla No. 1: Por lo general, las mujeres nunca dan el primer paso, y cuando lo dan, es porque les gusta jugar al cazador, sabes a lo que me refiero?

Regla No. 2: Casi siempre las mujeres buscan cosas inexistentes en los hombres por los cuales se sienten atraídas, que por lo tanto las obligan a buscar y buscar sin encontrar nada

Regla No. 3: Cuando al fin Encuentran eso que buscaban, después de un tiempo terminan aburriéndose de eso que tanto buscaban y que al fin tienen, lo cual me lleva a la siguiente regla

Regla No. 4: Los Hombres Siempre dan el primer paso, más que nada por la regla #1 y porque si no lo hacen, se sienten menos por no comportarse como los demás en su especie.

Regla No. 5: Casi siempre buscamos algo en las mujeres que realmente no existe, o al menos lo tenemos que ir cultivando con un esfuerzo mutuo, por lo cual casi siempre terminamos rindiéndonos

Regla No. 6: Igual que las mujeres, cuando al fin lo encontramos, terminamos aburriéndonos de aquella relación, fijándonos entonces una meta distinta, cayendo todos en el mismo ciclo vicioso que nos gusta llamar "Amor"

Debido a que no me gusta seguir esa clase de reglas, mis experiencias en este aspecto de la vida han sido por demás infructíferas (en pocas palabras, un Desastre). y en unos momentos les voy a contar una de mis mejores anécdotas (Que por cierto también es uno de mis mayores fracasos) en cuestión de "Amores": (Nota: Los diálogos están un poco arreglados para no mostrar las palabrotas a las que ya estoy acostumbrado a escuchar y decir, ok? no crean que todos hablamos tan correctamente)

Fue hace un tiempo, mucho antes de que yo llegara a pensar en entrar a trabajar en una fábrica (Dígase Starion) cuando Joven, sin trabajo ni planes para el futuro, deliberaba sobre mi vida. En ése tiempo no me reconocerías, era mucho más gordito (hehe) además de que mi actitud hacia la vida era muy diferente; recién habíamos corrido a mi padre de la casa debido a su irresponsabilidad y sobre todo porque nos hacía más mal que bien, en fin. Ésa era la primavera del año 2003; y la mayor parte de mi atención se enfocaba hacia la familia. Debido a la falta de la principal parte de los ingresos en la casa, mi hermana había entrado a trabajar en Merkafon, donde para entonces ella ya pertenecía al Depto. de Calidad, yo acababa de salirme de la Gasolinera, más que nada por falta de entusiasmo de mi parte "y" a que yo sabía que ese puesto no era para mí, aunque ya me habían subido a encargado del turno de noche, y había tentativas ofertas para ser Gerente, pero en fin, lo de la gasolina no era mi negocio. Habían Pasado casi tres meses, y yo desempleado, Con el cabello tan largo que lo tenía en cola de caballo, y sin realizar esfuerzos por conseguir otro trabajo; debo admitir con cierto arrepentimiento que disfruté ese poco tiempo para relajarme y tratar de no pensar en mis problemas, lo cual obviamente era una falacia; en mi casa no se hablaba de otra cosa que no fueran problemas, y la fuerte presión que ejercía mi madre sobre mi necesidad de conseguir empleo, me obligó a empezar a buscar uno. Realmente no tuve que buscar mucho; ya que mi vecina, Claudia, trabajaba como acomodadora en un Waldo's Mart cerca de la casa (Dios Bendiga la suerte del Mexicano). Ella me ayudó a aplicar en un puesto, el cual acepté renuentemente, ya que tenía que fungir como guardia de Seguridad. Una de las Ventajas era que la gente me veía como figura de autoridad, además de que el único contratiempo era la imposibilidad de sentarse, al menos no durante el turno, que era de 12 horas diarias con un sólo día de descanso entre semana, para acabarme de amolar, pero al fin y al cabo, era un trabajo por el cual me pagaban. La primer semana en el trabajo fue algo agotador, nunca había estado parado durante tanto tiempo en mi vida, así que era obvio que mis pies estaban a punto de estallar, sin olvidar que las tareas del guardia de seguridad eran además de vigilar, también era de eliminar las mermas, contabilizarlas, ayudar en paquetería (Bolsas, mochilas, etc.) y Recibir la Mercancía de los Proveedores. En este empleo aprendí muchas cosas sobre mercadeo y presentación estratégica de productos clave en un mercado, además de Manejo de Almacenes, inventarios y Transporte.

La segunda semana fue semana de pago, porque además me pagaban por quincena; mi jefe me pidió que cortara el pelo, a lo cual tuve que acceder para no perder mi empleo, y desde entonces uso el mismo peinado que uds. conocen. Mi primer pago, y todo lo tuve que entregar en casa, sobre todo para pagar recibos y comprar los víveres, que nunca parecen ser suficientes. Ya me había acostumbrado a los turnos y a las tareas, y en ese tiempo mi atención se comenzó a posar sobre las relaciones personales; compañeros de trabajo, socializar con mi jefe, etc. Las paqueteritas ya me llamaban por mi Primer Nombre (Recalco esto porque casi nunca lo hacen, hehe), y mi jefe comenzaba a comentar que pronto habría un puesto disponible para supervisión, lo cual realmente no me interesaba, pues se trataba de ir de tienda en tienda revisando que los guardias y los acomodadores estuvieran haciendo su trabajo, y la idea nunca me gustó en realidad. Fue en este tiempo cuando comencé a interactuar con mis compañeros y compañeras de trabajo. Casi todos pertenecen o pertenecían a la clase social media alta, lo cual me pareció conveniente, ya que los típicos temas de conversación se trataban de algo más entretenido que de trabajo o relaciones personales, es decir, no eran típicas conversaciones triviales y sin sentido; que por lo mismo no me parecen ideales para formar nexos con las personas.

En fin, para entonces, ya conocía a todos en el lugar y el trabajo ya no parecía trabajo (siempre parece que hago eso) y me encontraba en un punto en el cual todo parece ir bien, hasta que un día de Marzo....

Yo me encontraba parado como zombie en el área de paquetería, en parte para no aburrirme, y en parte para hacer reír a las paqueteritas, que para entonces ya me habían agarrado de su payasito, lo cual me ayudaba a pasar el tiempo; y en ese justo momento, noté que alguien entraba.... Debido al encandilamiento no pude ver bien quien era, pero en ese momento pensé que era un jovencito que entraba a comprar, cuando escuché su voz por primera vez....

"Disculpa, con quién puedo dejar esta solicitud?" decía una clara y un tanto quebradiza voz: "Vengo a pedir jale y no sé con quién hablar". -Bueno, si quieres, déjame la solicitud, yo la paso a "Recursos Humanos"- dije mientras señalaba la Bodega, y me reía por dentro. Nosotros te hablamos en unos días. Cuando empecé a fijar la mirada, la pude ver bien, era una chavita como de mi estatura, con el rostro fino y silvestre, es decir, sin maquillaje ni nada, y el pelo cortito, como de niño con el pelo largo, me entiendes? además de que era delgada, pero sin llegar a ser flaca, eso sí lo pude notar entre su ropa un tanto holgada. "Ok, entonces luego vengo, cuando me llamen" dijo mientras sonreía y me entregaba el documento para que yo lo guardara en un lugar especial en paquetería. "Órale, si quieres, pasa a la tienda para que te vayas acostumbrando al lugar" dije un tanto soñoliento mientras la recorría con los ojos (perdón, soy hombre) y pensaba que no estaba tan mal para mis gustos....

Ahora debo comentar que otra de mis tareas como guardia de seguridad era también la de reclutamiento y entrevistar al personal, lo cual casi nunca sucedía, pero me encargaba de entregar solicitudes al gerente para el final del día. lo más gracioso del asunto es que se me olvidó entregarlas ese día, a lo cual me acordé hasta el siguiente día.

Había olvidado el asunto y seguió hasta entonces mi divertida rutina. Exactamente 3 días pasaron cuando llegó el gerente para decirme: "Muy bien, Jorge: el día de hoy tenemos un nuevo integrante en el equipo, Acabo de hablar con "ella" por teléfono y va entrar hoy en el turno de 3 a 11 así que ponte listo; para cuando llegue Diana, le das un "Tour" y le explicas más o menos lo que va a hacer". -"Ok, a qué área va la muchacha?" pregunté sin mucho afán, ya que además de reclutamiento y entrevistas, también tenía que dar capacitación.... -"Principalmente acomodando las góndolas y el área de perfumes (que en realidad era un pasillo lleno de perfumitos, productos para el cabello, y desodorantes de 15 pesos ^^). -"Ok, no hay problema, yo le doy su "Capacitación", - Enfaticé la palabra para hacer saber al gerente que yo no debería estar haciendo esto, o que al menos no por lo que me pagaban.... "Ok, luego hablamos de tu nuevo "puesto", me dijo mientras me daba una palmada en la espalda, entendiendo ambos perfectamente nuestras indirectas. Para entonces apenas eran las 11 de la mañana, ya que ese día me tocaba el turno de 7 a 7, y me relevo llegaba a las 3 y se iba hasta las once, a lo cual era pensado en las horas pico de la tienda, lo cual funcionaba a la maravilla. pero luego entramos en detalles, mientras continúo con el relato:

Llegaron las 3 de la tarde, y llegó la nueva "recluta": Era la chava del otro día, lo cual no me sorprendió del todo, ya que era la única mujer en dejar solicitud en la última semana. Entró a la Tienda con el típico uniforme rojo y negro requerido por la compañía, un pantalón de vestir que a mi ver no le favorecía en nada, ya que era bastante holgado, de hecho era un pantalón de hombre, y su camisa tipo Polo también le quedaba algo grande, en mi primera deducción la ropa se la habría prestado algún hermano suyo, por lo cual ella también se veía poco femenina, lo cual me pareció algo gracioso y también me provocó cierta incertidumbre, ya que me cruzó una idea bastante extraña por la cabeza, pero en fin, sigamos con el cuento:

"Hola! sigues aquí?" me dijo en un tono entusiasta, casi fanático con su fina y quebradiza voz: "Sí, si crees que no tengo dónde vivir..." le contesté en un tono muy sarcástico, demasiado para mi gusto... ella soltó una carcajada dejando ver su perfecta dentadura, no en el hecho de que se la hubieran arreglado, sino que se veía en armonía con su persona, es decir; su sonrisa no resplandecía, pero era muy derecha y sin espacios evidentes entre cada incisivo, ni los demás dientes, lo cual me pareció realmente inusual.... En fin, le di el famoso "tour", le presenté a los empleados del turno, le indiqué las áreas de interés, como el comedor, y no podían faltar los baños, le mostré las áreas de la tienda y le mostré donde iba a pasar el resto del día. Ése día pensé que se encontraba bajo el efecto de potentes estimulantes, ya que andaba por todos lados como avispa, moviendo aquí, limpiando allá, vendiendo esto, poniendo aquello, en fin, parecía una demente, además de que encontraba tiempo para regresar a paquetería y hacerme reír con sus Comentarios.... en éste párrafo debo hacer una pausa para hacerte saber que hay pocas personas que realmente me pueden hacer reír, y no es que yo sea un pesado, sino que mi sentido del humor es muy extraño, y mucho menos las mujeres que lo pueden lograr... no me lo tomes a mal, simplemente así es mi naturaleza.

EL caso es que ella sí me hacía reír, lo cual hizo que me llamara la atención, lo segundo fue que rápidamente se hizo amiga de mi vecina, quien seguía trabajando ahí, la cual usualmente nos invitaba a mí y a Diana a su casa cada viernes, para "platicar". Desde el principio supe que sólo era una excusa de mi vecina para encandilarme a Diana, aunque me gustaba seguirles el juego; no podía negar que me llamaba la atención esta niña casi sin modales, que se la pasaba todo el día como niño hiperactivo, haciéndome reír con sus tonterías y yo también haciéndola reír hasta el dolor abdominal, así que también yo iba todos los Viernes a casa de Claudia, mi vecina. En aquellas noches, nos poníamos a platicar de cosas divertidas, aunque hubo noches en las que ellas se ponían a cantar, y yo me la pasaba riéndome de ellas mientras las arremedaba, hasta que a Diana se le ocurrió la de la noche: "Cántame una canción!!" me decía mientras yo la miraba como alguien que ve a un loquito o a un niño chiquito... -"Ok, pónganme una canción..." -"Una de Sin Bandera!" Casi gritaron al unísono cuando me preparé con la de Te Vi Venir. Algo extraño sucedió en ese momento, al cantar la canción no pude apartar la vista de sus ojos, lo cual me puso realmente nervioso, pero al mismo tiempo me dieron más ganas de cantar con todo el sentimiento que acompaña la canción. Ella estaba seria, con los ojos bien abiertos, y tampoco podía dejar de verme, para esto estábamos los tres en la salita de la casa de mi vecina a unos cuantos centímetros de distancia. Puedo decir sin miedo al dolor que me produce el recuerdo que sentí algo que nunca en mi vida había podido experimentar, y no creo poder volver a hacerlo... fue una conexión entre los dos a través de la mirada, que me hizo sentir un calor en el estómago, al mismo tiempo que mi ritmo cardíaco se aceleraba cada vez más y más, hasta llegar a un punto en el que sentía que gritaría, todo en unos cuantos momentos. Al terminar mi canción, la sala se llenó de un incómodo silencio mientras mi vecina trataba de encontrar algo que decir para evitar esa sensación tan extraña. Yo le gané diciendo: "Válgame, ya son las dos! me tengo que levantar temprano, me toca el turno de día! nos vemos mañana, ok?" y mientras me disponía a salir corriendo de ahí, Diana dijo en un tono casi triste: "Ya es muy tarde y no me quisiera ir sola, me acompañan a la avenida a tomar un taxi?" Justo en ese instante mi mente se quedó en blanco, y pensé que al menos debería acompañarla a tomar el taxi. "Pues yo ya tengo mucho sueño, dile a Jorge que te acompañe" Dijo perezosamente Claudia mientras bostezaba. Accedí como no queriendo, pues me preocupaba un poco el legar desvelado al trabajo, pero por otro lado me intrigaba lo que pudiera llegar a pasar en esos momentos. Cuando llegamos a la avenida, ella estaba rara, pensativa. Le pregunté si se sentía bien, pues en estas pequeñas reuniones solíamos beber vino o cervezas, dependiendo de la disponibilidad del producto. "Sí, estoy bien, pero no me quiero ir sola a mi casa, me acompañas en el taxi? la otra vez me tocó un señor muy mal encarado y me quedé traumada con eso". solté una pequeña carcajada y accedí de buen modo, de cualquier forma tenía los recursos para hacerlo. cuando por fin conseguimos un taxi, sin darme cuenta hice algo que rara vez sucede cuando abordo un auto: me senté en la parte trasera, junto con Diana; lo cual me extrañó, pues siempre me siento adelante. Le tomó 30 minutos al conductor, que a mi forma de ver también estaba muy mal encarado, en llegar a la casa de Diana. Ella le había dado las instrucciones y mientras íbamos en el auto, ella se quedaba medio dormida, o al menos eso parecía, y se recargaba en mi hombro; agradeciendo en mis pensamientos que el camino no era accidentado, de hecho, estaba bastante libre de saltos y baches, así no la golpearía en la cara con mi hombro, hehe. Al llegar a su casa, nos bajamos del auto, y como siempre, yo me bajé primero para ayudarla a salir del vehículo, a lo cual ella cooperó con evidente sorpresa en su rostro. Al parecer ella no estaba acostumbrada a esta clase de trato, pero no le puse tanta importancia en el momento. Le pagué al taxista, lo cual también la sorprendió, y me dispuse a encaminarla entre la calle de su casa. "Mi casa está cerca, vamos a caminar para despejarnos un poco, no?" Decía mientras yo apena iba a protestar por bajarnos antes. Mientras caminábamos por la amplia banqueta de su colonia, yo observaba los árboles de las casas, tan Grandes y verdes, rebosantes de hojas, que cubrían por completo la calle, haciendo como un techo verde y oscuro durante las noches, dándole un toque apacible y sereno al lugar. El viento era ligero y fresco, provocando un suave murmullo en las ramas de los árboles, lo cual me pareció un sonido exquisito. Habiendo dejado las preguntas básicas en los primeros días de su empleo en el mini-super, diana me volteó a ver y me preguntó: "Por qué no tienes novia?" lo cual me agarró casi por sorpresa, y digo casi porque ya sabía a dónde iba la conversación. "Hay muchas razones. Primera que en estos momentos debo mantener a mi familia; lo cual no es tanto una razón sino una excusa. Segundo que no tengo novia porque simplemente no he buscado una, y estoy seguro que si me pongo a buscar, me va a tomar mucho tiempo encontrarla, así que en este momento estoy bien así, aunque creo que ya ni siquiera tengo que buscar.... y tú? tienes novio, esposo, amante, quizá?" Ella soltó una ligera risa dejando ver nuevamente su sonrisa perfecta mientras parecía preparar algún otro comentario gracioso para contrarrestar mi broma: "Bueno, acabo de terminar con un tipo que realmente no valía la pena, por lo cual no tengo problemas si me llega algún pretendiente por ahí...". Justo en ese momento se me prendió el foco y tuve, realmente tuve que decir: "Entonces ya nos fregamos, Yo sin buscar vieja y tú esperando que lleguen solos..." a lo cual los dos nos reímos bastante fuerte. al recuperarnos de la risa, suspiramos al mimo tiempo, y en ese momento sucedió lo que todos esperan en la película romántica: El silencio, las miradas, el acercamiento, y un largo y apasionado beso. Tengo que confesarte que en ese momento pensé que moriría, mi corazón iba a mil por hora, y casi no podía respirar, pero no sé qué paso que logré separarme un momento y le dije: "Estás segura de esto?" -"Mira mis ojos y dime si no estoy segura...". Tenía la misma mirada que hace unos minutos en casa de mi amiga, esa mirada pura y silvestre que me inundó el corazón mientras cantaba la canción sólo para ella....

Lo que más recuerdo es que su casa estaba justo frente a nosotros cuando nos besamos, y se despidió de mí con ése saludo que usamos lo jóvenes, cuando chocamos las manos abiertas y luego con el puño cerrado, lo cual me hizo reír de nuevo, se metió a su casa, y yo me fui a la avenida, a esperar un taxi....

Ésta es la primera parte de una historia que empieza bien y termina horriblemente mal, pero falta una segunda parte...

No quiero ser un Blogstar...

3/09/2007 04:45:00 a.m. Posted by Azrael

Hace poco, mientras hablaba largo y tendido con un amigo mientras lo acompañaba a distancia en su peda, y me contagiaba un poco de su "Virus T" (MEZCAAAAL*) a través del internéis (sí, también descubrimos afecciones transmitidas digitalmente), discutíamos acerca del por qué nos ponemos a hacer blogs; en la conversación tuvimos una revelación: En realidad todos aquellos que escribimos en un blog somos exhibicionistas, y nos gusta saber que alguien más se entera de todo lo que pasa en nuestras vidas; y al leer lo que escriben otras personas en su blog, también nos volvemos un poco Voyeuristas. Pero lo que realmente hace a un blog algo extraordinario no son las anécdotas en sí, sino la forma en que son contadas al público.

La forma en que yo cuento mis historias, o lo que hago con ellas podría decirse que es bastante sobria (si no es que sombría), y creo que en algún momento debería cambiar eso un poco, a menos que quiera que mi "público" piense que estoy amargado, lo cual aún me rehúso a aceptar.


También llegué a una conclusión con respecto a la forma en que yo hago mi blog: en realidad yo no lo hago en busca de una audiencia, sino que yo hago uso de este espacio para dejar, si acaso se puede decir así, mis vivencias, miedos, frustraciones y demás chaquetas mentales en un medio por así decirlo permanente; y de esta forma poder tener acceso a mis pensamientos cuando me sea necesario recuperar algo de mi (cordura?).

Pero después de sentirme como si hubiera yo cogido con Demi Moore, Angelina Jolie y Mila Jovovich al mismo tiempo ante tales descubrimientos, también me di cuenta de algo aterradoramente cierto: Si en realidad escribo para mí mismo, ¿Por qué mi blog sigue siendo público?....

No espero una respuesta concreta al respecto, pues me saca más de onda que la pregunta en sí...

El princicpio del fin (Again?)

3/08/2007 01:51:00 a.m. Posted by Azrael

Gracias por visitar el blog. Creo que a partir de ahora, los posts van a tener un poco más de jugo literario, por poco que sea, ya que al parecer ha vuelto algo que pensé desde hace mucho tiempo había perido para siempre, si quieren saber lo que es, sigan leyendo lo del día de hoy...



El Miércoles desperté con un sobresalto. En ese momento estaba casi seguro que fue algo que soñé; pero hay ocasiones en las que por más que te esfuerzas no puedes recordar lo que acabas de soñar, y entre más tratas de hacer memoria, cada vez sientes más cómo ese sueño se te va escapanado de la mente. En la mañana lo dejé por las buenas, haciendo pequeños ejercicios mentales como recordar algún sonido, o algún rostro que pudiera haber salido en el sueño, sin esforzar el cerebro en el proceso, para evitar una posible pérdida completa.

El día seguia su curso, y yo continuaba sin poder recordar lo que había soñado,lo cual me empezaba a molestar, pues la sensación que tenía al despertar me parecía muy familiar, sin poder llegar a identificar exactamente lo que era.

Al subirme al camión, en rumbo hacia el trabajo, me aventé la jeta de ley, que por lo general dura unos 40 o 50 minutos, valiéndome madres la opinión pública. Fue durante tal jetilla, que el sueño que me eludía con tanto afán regresó a mi cerebro. Resulta que en este sueño, me encontraba con la persona menos imaginable a estas alturas de mi vida. Era Diana, aquella chica de la que escribí tanto en los primeros posts de mi antiguo blog (el de MSN), de quien estúpidamente me enamoré y perdí algo que hasta ahora pensé no recuperaría. En este sueño, yo hablaba con ella, y estoy casi seguro que se veía exactamente como era cuando la conocí, con esa mirada tan llena de vida, su cabello corto, y su sonrisa perfecta. Lo poco que aún recuerdo de este sueño es que mientras yo hablaba con ella, la conversación se volvía en torno a lo que pasó, de cómo terminaron las cosas, y recuerdo que yo le mencionaba que de haber sabido que lo punico que ella quería era ser libre, yo lo hubiera entendido, si tan sólo ella me lo hubiero dicho en su momento. En esta parte del sueño, sentí lo mismo que tenía cuando desperté ese día, y al fin pude saber lo que era: Melancolía.

Melancolía. Algo que se había alejando de mí desde hace ya tanto tiempo, que llegué a pensar que no existía tal cosa. Recuerdo que su semblante cambió en ese momento, volviéndose melancólico, igual que yo, y mientras yo trataba de seguir su mirada, ella se volteaba y se alejaba de mí. Desperté aún a mitad del camino, con esa extraña sensación en el pecho y maldiciéndome por dentro, molesto conmigo mismo por seguir divagando en semejantes tonterías. Es decir, ya han pasado más de 3 años desde que esto había pasado ¿Por qué seguir buscando una respuesta una y otra vez? Sé que no la volveré a ver en mi vida, lo cual tal vez sea lo mejor, pero al parecer mi lado inconsciente sigue tratando de justificar todo lo que sucedió, intentando darme razones inexistentes por lo cual pasó lo que pasó.

Hoy en día, mi vida social es algo casi aceptable. tengo amigos y en mi trabajo me llevo bien con todos. No falta algún coqueteo casual con alguna chica, pero en estos momentos no creo conveniente buscar algo más; sin embargo la melancolía parece haber llegdo para quedarse, y aunque el sentimiento no se centra en Ella, me mantiene en un estado de ánimo muy incpodo, pero al perecer también propicio para escribir, pues soy muy malo para expresarme con palabras, al menos con respecto a mí mismo.

Si apun hay alguien que visite este blog, agradecería algún comentario, chascarrillo, o frase de apoyo/solidaridad, para saber si debería seguir escribiendo, o simplemente retirarme y esperar a que la melancolía se apodere de mi vida, como ya había sucedido hace algunos años.

Nada que hacer (Aún....)

3/07/2007 01:36:00 a.m. Posted by Azrael



Hoy no tengo nada que escribir en el blog.
Lo poco que se me había ocurrido se me olvidó al leer el post de mi compa el Telo, así que el día de hoy, no hay nada para este blog.

Excepto......



No me corrieron del trabajo, incluso después de haber faltado más de 3 días; no me cambiaron se supervisor, lo cual es una excelente noticia; me monitorearon y salí bien (hasta yo me saqué de onda, pero es cierto), y mi cabello sigue creciendo sin control (puro pedo, no me lo he ido a cortar en 6 meses). No ha sido un mal día, sólo que no es algo que valga la pena mencionar en un blog, o tal vez sí, me vale madres detodos modos.

WEVA (o de cuando no hay nada mejor que hacer)

3/04/2007 01:09:00 a.m. Posted by Azrael


El día de hoy (o más bien el día de ayer) se suponía que iría a una convención de revistas cómicas y videojuegos, pero la verdad es que me dio hueva, y también tuve otra razón para no ir. Aún cuando la oferta era tentadora (es decir, no muchas veces sales con una chava que te cae bien a hacer algo que la hace feliz), hubo fuerzas mayores fuera de mi alcance las cuales conspiraron en mi contra. Sucede que al Feliz (amigo de incontables desventuras y pendejadas) la faltó el dinero para ir con nosotros a la convención, pues tuvo que darle el dinero a su madre para pagar algunas deudas, impidiéndole pagar su entrada, y mucho menos su transporte al lugar. Cuando fui por el para recoger a Cinthia (la amiga), me enteré de lo ocurrido. En ese momento me enfrenté a una decisión que no era muy fácil de tomar: Podía dejarlo ahí, e irme solo con Cinthia, o podía quedarme, gastar mi dinero en otras coas, y mandar a la chingada a Cinthia. Gracias a un consejo de otro viejo amigo, decidí que "compa mata vieja" y quedarme; mandando a la niña a freír espárragos. Al ir a casa de Cinthia, aproveché mis habilidades diplomáticas (entiéndase por "mentir") para explicar la razón por la cual no podría acompañarla a la convención, lo cual no pareció molestarla mucho. En resumen, me pasé el día tirando hueva y pendejeando en la calle con otros amigos, lo cual normalmente me haría sentir a gusto, pero creo que perdía una buena oportunidad de pasar tiempo con Cinthia. Sólo el tiempo lo dirá....