Back On Earth
Este es el título de una canción de Ozzy Osbourne, título que no podría identificarse más con el post del día de hoy.
Después de una prolongada ausencia (uta, más de un mes sin postiar) he decidio volver a escribir, aunque sea una sarta de idioteces, pero escribir al fin y al cabo.
Hace unos días fui al cine con mi mamá y mi extraño hermano Xion a ver la pelíocula de Transformers, y debo decir que los efectos especiales estaban chingones. Además de que todo el asunto estaba bastante gracioso, pues los robots estos tienen las mismas personalidades que recuerdo de la caricatura, y es bastante chido ver que las cosas que te gustaban cuando eras chamaco, las traen de vuelta con un toque más fresco y actual.
Creo que el tema principal de mi post es precisamente eso, cuando la Nostalgia no llega a superar el regreso del pasado.
Hoy en día lo vemos en todas partes: Remakes de películas antiguas, shows de televisión renovados pero con la misma vieja fórmula, Videojuegos que suponen ser la continuación de algún título de antaño, el cual llena los huecos que dejaron sus predecesores. El mundo de la mercadotecnia se ha adueñado por completo del término "refrito", llevándolo al extremo y exprimiendo hasta la última gota de ese sentimiento nostálgico que cada quien lleva consigo para no tener que inventar algún producto nuevo, o siquiera tener alguna idea fresca, nueva e inteligente. Simplemente se dedican a reutilizar lo que ya había funcionado antes, pero con un toque "moderno", para atrater a las masas y obtener las tan esperadas ganancias. A las personas les gusta saber que muchas de las cosas que disfrutaron cuando niños, regresan a sus vidas con un empaque metalizado y alguna que otra chuchería para adornar, sin cambiar realmente su esencia.
Por mucho que funcione este esquema en el presente, es necesario recordar que no siempre estaremos recordando el pasado y en ocasiones nos gusta mirar hacia lo que tenemos delante nuestro, y es donde deberíamos empezar a enfocarnos.
También hice una corta visita al bló de mi compadre El Masio y me di cuenta que recientemente ha entrado a un estado de conciencia que me resultó desagradablemente familiar. a sus recientes posts se me ocurrió hacer un comentario, y me pareció conveniente (wevón que soy, al fin y al cabo) ponerlo en mi bló también.
"Chingadamadrecontigo, Masio!pensé que yo era el único cabrón que caería en esa pinche etapa retrógrada e introspectiva de la vida cotidiana....El debraye que hiciste en tu post me hace recordar lo que yo he llegado a atizbar en mis peores días.
Hay un punto en nuestra conciencia que nos hace creer que todo lo que nos rodea: nuestro ambiente, nuestro círculo social, nuestra familia e incluso nuestra propia vida y mente se encuentran en una especie de teatro guiñol del cual no podemos salir sin antes terminar la función. La realidad es otra, pues al alcanzar un estado de conciencia digamos un poco más desapegado a las ideas del Diseño Inteligente y otras cuantas falacias filosóficas, nos damos cuenta que los verdaderos dueños del destino somos nosotros mismos, al tener un control sobre nuestras acciones, ideas y pensamientos, incluso a veces llegando a contradecir nuestra propia esencia.
A mí también me ha pasado, infinidad de veces, y lo único que hace que vuelva a la realidad que yo reconozco como mía, es realizar un acto, tener una idea, o incluso decir algo que no se encuentra dentro del contexto de la vida diaria que pasamos hora tras hora, haciendo las misma cosas una y otra vez.
La rutina es el peor de los males para los huevones filósofos como nosotros, la neta."
Chingado, cómo nomás a veces me sale lo elocuente!
