Un blog

Se acerca la lluvia, y con ella, momentos de reflexión, introspectiva y nostalgia.

Pienso en todo el tiempo que estuve solo sin darme cuenta, y que todo habría seguido así de no haber encontrado a J de nuevo.

Las nubes empiezan a luchar en el domo celeste, empujándose y mezclándose hasta formar un sólo cuerpo que cubre el cielo por completo.

Mientras tanto, pienso en lo que el futuro tiene para mí:
El fin de la soledad? El fin de la inercia? El principio de una vida nueva? Nuevas experiencias o tal vez nuevas emociones? Nuevos dolores, éxitos y fracasos? no tengo idea. Es la primera vez que la incertidumbre no me pesa; tal vez sea porque ahora que J está conmigo no hay preocupación, no hay miedo ni inseguridades; simplemente no hay dolor.

Las gotas empiezan a caer y traen un viento suave pero seguro; un aire fresco, lleno de humedad y a través de él se puede percibir la ilusión de una futura abundancia.


La lluvia es algo que esperaba desde hace tiempo, y ahora que está aquí, no quiero que pare.